No queremos que desaparezca la filosofía del curriculum

Creemos en una enseñanza pública de calidad, por este motivo, exigimos al gobierno autonómico que la asignatura de filosofía deje de ser optativa para ser obligatoria en 4º de la ESO y en 2º de bachillerato.

Entendemos que el contenido de esta materia es indispensable para la formación de nuestros hijos e hijas, no solo a nivel académico, sino también a nivel personal. “Más allá de los conocimientos, creemos en una enseñanza pública que forme a personas, creemos en una educación que prepare a nuestros hijos e hijas para que sean capaces de crear una sociedad mejor y para que tengan las herramientas necesarias que les garanticen un futuro más seguro”, declara el Presidente de la Confederación, Raúl Alós, quién se reunió ayer con Ángel Vallejo, representante de la plataforma que defiende la permanencia de la asignatura en la educación secundaria y bachiller para conocer de primera mano cuál era la situación.

Consideramos que es urgente que la Conselleria d’Educació modifique el curriculum de educación secundaria y el de bachillerato para que la asignatura de filosofía sea de carácter obligatoria el próximo curso, y no optativa como contempla la LOMCE. Entendemos que si el próximo año, la filosofía apenas pondera para la nota final por su condición de optativa, los alumnos no se van sentir motivados para matricularse en esta asignatura, lo que repercutirá negativamente en el número de matriculados y en el peso que tendrá dentro del curriculum.

Aunque el carácter optativo de la asignatura de filosofía lo marca la LOMCE, hemos comprobado cómo en otras comunidades autónomas han encontrado los recursos para garantizar el futuro de esta materia. Las familias de la Gonzalo Anaya no entendemos cómo en otras comunidades han conseguido la manera de darle a la filosofía una importancia mayor y en la Comunitat Valenciana no se modifica el curriculum y sigue ofreciéndose como opcional, añade Alós. Queremos saber por qué el gobierno autonómico no toma medidas para cambiar esta situación que entendemos es un perjuicio para nuestros hijos e hijas que recibirán una formación en desventaja con otras comunidades autónomas.